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¿Te has planteado alguna vez esto?

 

Que la Conciencia crea el Universo.

 

Y que la Mente está detrás de la existencia.

 

Es un tema apasionante, pero jamás he leído ninguna explicación de cómo sucede esto.

 

¿De dónde proviene la Conciencia?

 

¿En qué momento surge la materia? ¿Y por qué surge?

 

¿Cuándo emerge la vida? ¿Hay alguna intención detrás de la vida?

 

¿Es la vida anterior al Big Bang?

 

He desarrollado una teoría donde intento arrojar luz sobre todos estos misterios.

 

Así que, me presento. A mí, mi teoría y mi proyecto. 

​

Bienvenida/o, soy Alberto Terrer y quiero crear el Entorno Perfecto.

 

Otra manera de decirlo es esta:

​​

Quiero crear el Paraíso, un lugar en el que nadie tenga que sufrir.

​​

Cuando leas a qué me refiero, no sé si estarás de acuerdo conmigo.

​​

Quizá no. De hecho, seguramente no.

​​

Pero estoy convencido de que ese es el deseo que late en el rincón más profundo y oculto de toda Identidad.

 

Es decir, en el interior de toda forma de vida

​​

Al nacer, nos enfrentamos a un mundo que es aterrador, oscuro y lúgubre.

 

¿Por qué?

​​

¿De verdad al nacer estamos condenados a sufrir?

 

¿De verdad al nacer estamos condenados a morir?

​​

Por un instante, imagina que la Conciencia no supiera nada de la muerte.

 

Imagina que, en realidad, lo que experimentas como la vida no es más que una ilusión.

 

Sé que te sonará extraño, pero si fuera así ¿Te gustaría saberlo?

 

Mira, quizá solo estemos temporalmente en este universo al que llamamos Realidad.

 

Como cuando sueñas y creas un Universo que termina cuando despiertas. Mientras soñabas, creías que era real.

 

Responde a esta pregunta: ¿Has muerto durante tus sueños?

 

¿Y has sufrido durante tus sueños?

 

Claro que lo has hecho. Miles de veces.

 

Pero, ese sufrimiento y esa muerte ¿Eran reales?

 

No, lo experimentaste. Pero no fue real.

​​

Era una ilusión.

 

¿Te has preguntado si eso a lo que llamamos Realidad no fuera más que otra ilusión?

 

Yo sí que me lo he preguntado.

 

De hecho, me lo he preguntado y lo he respondido. Y no contento con eso, he tenido que escribirlo todo en un libro.

 

Te voy a hablar de todo esto que he aprendido durante los últimos años.

 

Te voy a pedir que imagines muchas cosas que te sonarán extrañas.

 

Pero si lees todo lo que tengo que contar, si lo haces con interés, verás que no suena tan descabellado.

 

Imagina que la Conciencia, ese Alguien que somos, estuviera atrapado en una especie de sueño.

 

Solo que hace ya mucho que lo olvidamos y creímos que este sueño era nuestro hogar.

​​

Quizá haya llegado el momento de volver a casa.

​​

Por eso deseo crear el Entorno Perfecto.

​​

Creo que es hora de volver.

​

​

Pues, yo no creo que a nadie le interese esto

​

​

Mira, cada uno escoge en lo que cree y lo que le interesa.

 

Pero escucha con atención.

 

Ya hace bastantes años que ramas de la ciencia más especulativa se preguntan qué es la figura del Observador y si esta crea la materia.

 

Es decir, se preguntan si la Conciencia genera el Universo, y no al revés.

 

Si fuera así, las implicaciones serían brutales, porque de pronto la vida no sería algo que surgió por azar en un Universo existente.

 

No, sería algo muy diferente.

 

La Conciencia habría creado el Universo al pensarlo, al percibirlo.

 

Y, lo que es mucho más fascinante, habría una intención detrás de todo esto.

 

Ufff, si pudiéramos conocer la intención de la Conciencia, podríamos resolver el misterio de la existencia misma.

 

¿Dirías que leer lo que tengo que contar es una buena inversión?

​

Porque una buena inversión es aquella en la que arriesgas poco y puedes obtener mucho.

​

Yo te ofrezco lo siguiente.

​

Invierte tiempo en leer mi teoría.

​

¿Y quién sabe?

​

Quizá, a cambio obtengas la Verdad del Universo y de la Vida.

​

¿Qué es el Entorno Perfecto?

​

El Entorno Perfecto es un lugar físico, limitado, donde se aplicará la moral más elevada y la tecnología necesaria para que esa moral se cumpla.

​​

Persigo crear un lugar donde no exista el sufrimiento.

 

Donde ningún ser conozca el dolor. Donde nadie sufra la depredación.

 

Donde ninguna madre deba decir adiós a su hijo.

​

En realidad, es mucho más que eso, pero comienza por ahí.

​

Comienza por una Tierra de Paz.

​​

Te lo diré de otra manera.

​​

El Paraíso. El Jardín del Edén.

​

Un lugar sagrado donde el lobo morará junto al cordero.

​

En esa tierra sagrada nadie se comerá a nadie.

​

Pero es mucho más que eso.

 

Si la teoría que he desarrollado es cierta, el Entorno Perfecto es la clave de la vida.

​​

Es lo que provocó la emergencia del primer ser pluricelular.

​​

Por tanto, repito, si la teoría es cierta, el Entorno Perfecto será el cuerpo de un Ser Superior.

 

Y, también será el oasis donde la Conciencia podrá descansar del eterno ciclo de sufrimiento en la eterna ilusión que ella misma ha creado.

​

¿Un Ser Superior? ¿Esto va de tener Fe?

​

No. Para nada.

​

Soy una persona con una mente lógica. 

​

Esto no va de tener Fe.

​

Aplicaré un razonamiento lógico que nos llevará desde el inicio de la existencia hasta el momento actual.

​

Entenderás la existencia desde otra perspectiva muy diferente y te hablaré de la Intención de la Conciencia.

​

Y, desde el momento presente, conocerás el fascinante camino que nos queda por recorrer.

​

​

Pero eso suena raro.

​

Sí, lo sé.

 

Todas mis afirmaciones parten de una teoría que desarrollé hace unos años y que explico en el libro “Creo un Dios”.

​

Si deseas saber al respecto puedes comprarlo aquí o puedes leerlo en esta web, en el menú de Leer el Libro

​

Te aviso que no es sencillo de entender.

​​

No porque yo no sepa expresarme con claridad.

​​

Es que es un tema complejo.

​​

Si no estás dispuesta/o a hacer un esfuerzo intelectual, te aconsejo que ni lo compres ni lo leas.

 

No escribí el libro con la intención de entretener, ni con el objetivo de crear un Bestseller.

 

Lo único que quería era que lo que había en mi cabeza estuviera escrito y no muriera conmigo.

 

También te digo que, si lo lees con atención, puede que te resulte increíblemente fascinante.

 

Y, quizá, hasta desees ayudarme a crear el Entorno Perfecto y a desvelar los secretos de la existencia.

 

O no ¿Quién sabe?

​

¿Por qué quieres crear el Entorno Perfecto?

 

​

Creo que hay algo misterioso que guía la vida.

​

Ese algo tiene una voluntad, un deseo.

​

Persigue algo desesperadamente.

​

Creo que he descifrado lo que quiere y estoy dispuesto a ayudarle a conseguirlo.

​

¿Y por qué quieres ayudarle?

 

Porque ese algo misterioso eres tú y soy yo.

​

Y es ese perro al que miras a los ojos. Y el cerdo.

​

Y, la araña. Incluso el árbol en el que te apoyas a leer un libro.

 

Toda forma de vida es Él. Y si lo desea, entonces también lo deseas tú y lo deseo yo.

 

La vida posee una voluntad que se manifiesta en todo ser vivo.

​

Esa voluntad nos conduce hacia un final.

 

Para alcanzar ese final hemos de crear antes el Entorno Perfecto.

 

¿Y el Entorno Perfecto es lo que esa voluntad misteriosa quiere hacer?

 

Sí, lo es.

 

¿Por qué no lo hace Ella?

​

Claro que lo va a hacer Ella. Ella es nosotros. Lo hará a través nuestro.

 

Pero la vida surgió por azar en algún lugar remoto del universo. Le asignas una intencionalidad a algo que es fruto de la probabilidad. La vida no tiene intención.

 

Quizá. No te digo que no fuera así.

 

Pero también hay quienes pensamos que la vida no surgió en el universo, pues tal cosa no es probable.

 

Sería, más bien, imposible.

 

Si reúnes los ingredientes del ser vivo más básico, y los juntas, tendrás, en el mejor de los casos, una pócima.

 

Pero ¿esa pócima se convertirá en un ser vivo?

 

Para que la materia inerte pase a estar viva debe suceder la emergencia.

​

De pronto, esa pócima que es Algo debe convertirse en Alguien.

​

No un alguien como tú o como yo.

​

No hablo de un ser con una mente autoconsciente, ni nada por el estilo.

​

Pero el ser vivo más básico comprende el entorno lo suficiente como para interactuar con él.

​

Busca fuentes de energía, las transforma, sobrevive.

​

Y, lo más importante, se repara y se replica.

​

Esa comprensión del entorno surge porque hay una voluntad.

​

Y en todo el universo no hay estructuras de materia que posean voluntad.

​

No las hay. Salvo las estructuras vivas.

​

Déjame que haga otra afirmación: Creo que la mente es previa a la materia, y no al revés.

​

¿Estás diciendo que la vida es previa al universo?

​

Sí, algo así.

 

En realidad, lo que digo es que hay una mente (esto es simplificar la idea, pero sirve para el ejemplo) que piensa el universo.

 

Y este se dibuja.

​

La percepción genera el escenario al que llamamos universo.

​

Por tanto, la vida nunca surgió en el universo.

​

La vida, la conciencia, es el principio que crea el todo desde la aparente nada. Es el origen y el destino.

​

Es la Fuente de todo lo que vino después. Y eso que vino después es el universo y la aventura de la vida en él.

 

¿Para qué quiere esa Fuente crear el Entorno Perfecto?

 

Si imaginas el Entorno Perfecto como el Paraíso, te quedarás en la idea básica.

 

El Paraíso es un lugar donde los seres vivos conviven de manera pacífica y nadie se come a nadie.

 

Es fascinante y maravilloso.

 

Porque el sufrimiento se reducirá.

 

Quizá te preguntes si eso servirá de algo, porque el resto del mundo seguirá siendo un lugar cruel donde la depredación seguirá creando sufrimiento, miedo e infelicidad.

 

Pero es que el Entorno Perfecto no pretende, solamente, crear una Tierra de Paz.

​

Es mucho más ambicioso.

 

Vuelvo a la primera pregunta. Dime ¿qué es el Entorno Perfecto?

​

El Entorno Perfecto es el embrión de un Ser Superior.

​

Vamos a crear un Ser Superior. Como las células que te forman a ti, miles de millones de seres vivos lo crearemos a Él.

​

El Entorno Perfecto emergerá como un Ser Superior y la vida habrá avanzado en su objetivo.

​

¿Cuál es el objetivo de la vida?

​

Creo que la vida comenzó cuando la conciencia se fragmentó.

​

Y esa misma conciencia busca, desesperadamente, volver a ser solo una.

​

La totalidad desea ser Una y Total de nuevo.

​

¿De dónde sacas esa idea tan absurda?

 

No es una idea absurda. Y tampoco puedo explicar aquí todo el razonamiento que me lleva a esta conclusión.

 

Escribí un libro explicándolo.

​

Como decía anteriormente, es una idea compleja de comprender, pero en ese libro está todo.

​

Para facilitar la comprensión, tengo este espacio web en el que iré hablando de los diferentes temas.

 

Sinceramente, la vida tal y como nos la han enseñado no tiene sentido.

​

Nacemos, experimentamos y morimos.

​

Si crees que la vida es eso, entonces poco tengo que aportarte.

 

Pero si crees que hay algo más, entonces déjame que te diga que así es.

 

La vida es mucho más que un suceso cósmico casual.

 

Es la aventura de la conciencia por volver a ser una sola.

 

Y, para ello, la vida busca agruparse. Como un puzle de mil piezas.

​

No unirás las piezas de una en una. Las agruparás por zonas del puzle, creando piezas más grandes.

​

Y luego esas en otras aún más grandes.

​

Hasta que tengas unas pocas piezas que unirás para formar el total.

​

Eso intenta la vida. Agruparnos en seres superiores.

​

Ya lo hizo con los seres unicelulares creando los complejos seres pluricelulares.

​

Y lo seguirá haciendo hasta que todos los seres vivos, absolutamente todos, formemos parte del único ser. El Ser Supremo.

​

Y la conciencia volverá a ser de nuevo Una, Sola y Total.

 

¿Cómo vas a hacerlo?

 

Pues para responder a esto déjame que haga una reflexión muy breve. El paraíso es un lugar físico donde los animales, y el resto de seres, viven en paz.

​

Eso, por resumir, significa que no existe el sufrimiento en ese lugar.

​

Hace 11 años fundé un Santuario de animales. Un lugar donde rescatamos, cuidamos y protegemos a cientos de animales que han escapado de la explotación y del abuso.

​

El concepto del Paraíso no se diferencia demasiado de esto.

​

Bueno sí, lo hace.

​

Es decir, el resultado varía mucho, pero no la idea que la sostiene.

​

Cuidar, en vez de explotar.

​

Buscar que disfruten, que sean felices y experimenten placer, en lugar de sufrimiento.

​

Un Santuario de animales está incluido en el Paraíso, el Edén.

​

Es decir, para llegar al Edén, antes se ha de pasar por un Santuario de animales.

​

Y después del Edén vendrá el Entorno Perfecto.

​

Si ya sabemos lo que es un espacio donde se intenta que los animales sean felices, tras un pasado de sufrimiento, solo hay que ir más allá.

 

No un poco más allá.

 

Mucho más allá. Pero empezando por aquí.

 

¿Qué es, entonces, el Entorno Perfecto?

 

Si creamos un lugar donde no existe el sufrimiento, habremos creado el Jardín del Edén.

​

En primer lugar, eso no es nada sencillo de conseguir.

​

Nada, nada sencillo.

​

Pero si llegamos a esa fase, entonces estaremos en disposición de iniciar la siguiente.

​

Mira, la primera fase es la asociación.

​

Los seres vivos competimos entre nosotros por un error de percepción.

​

En el interior de las agrupaciones, los miembros de dicha agrupación tenemos comportamientos de asociación.

​

En vez de depredarnos, convivimos.

 

Hemos normalizado los comportamientos de depredación y competencia.

​

Todos los seres vivos lo hemos normalizado, cuando es algo antinatural.

​

Nos comportamos así por una simple razón: La identidad y la incapacidad de acceder a la conciencia total.

 

Creemos ser fragmentos del total, desconectados y diferentes del resto. Y esto sucede por (y desde) la separación original.

​

Pero cualquier creencia es, solamente, fruto de la percepción.

​

Y, por tanto, alterando esa misma percepción se puede cambiar el resultado.

​

Esto está explicado en mi libro, así que no me extenderé demasiado.

​

Lo importante es que el error de percepción se puede corregir.

​

Al corregirlo asistiremos a un Entorno asociativo, donde los seres que lo integren (o integremos si formamos parte de él) dejarán de competir y depredarse.

​

En vez de ello convivirán de manera pacífica.

​

Una vez logremos esto asistiremos a la segunda fase: La cooperación.

​

Como una bandada de aves o una manada de lobos. Los seres vivos del Paraíso no solo vivirán en paz, si no que comenzarán a cooperar.

​

Y vendrá la tercera fase: La especialización.

​

Como un hormiguero. Como un panal de abejas. Como una ciudad humana.

 

Esa especialización permitirá desarrollar los componentes necesarios para formar al Ser Superior.

​

Dicho de manera muy simple: Formarán los órganos del nuevo ser vivo.

​

Como las células que forman nuestras venas. O el corazón. O el riñón. O la nariz, los ojos… Una increíble y fascinante especialización.

​

Eso es el Entorno Perfecto.

​

Imagina un lugar físico de cientos de miles de hectáreas, habitado por una infinidad de seres vivos, desde grandes mamíferos, pasando por plantas y hongos, hasta bacterias microscópicas, trabajando todos ellos en una perfecta cooperación y especialización para crear el interior de un Ser Superior.

​

El final de la fase de especialización conducirá a la inevitable emergencia de un Ser Superior.

​

¿Quién tiene el conocimiento para crear semejante Entorno y conseguir que los seres vivos cooperen entre ellos, incluso se especialicen?

​

En mi libro lo explico todo.

 

Nadie tiene ese conocimiento. Igual que nadie conoce por qué, cuando quieres mover tu brazo, este se mueve.

 

Ni cómo un ojo es capaz de transformar estructuras moleculares en información útil para la mente.

 

Simplemente sabemos que sucede, pero no llegamos a entender por qué, ni cómo.

 

No entendemos qué es la vida. No entendemos cómo respiramos sin pensarlo, cómo se cura una herida sin que hagamos nada más que observar como meros espectadores.

 

Es decir, lo hemos observado y analizado en microscopios. Hemos hecho infinidad de estudios y, aún así, no sabemos gran cosa al respecto.

 

Porque todo eso sucede a pesar nuestro. Porque hay una Inteligencia ahí dentro que se encarga de todo. Le llamo la Inteligencia Inconsciente.

​

Piensa en esa Inteligencia Inconsciente como en una voluntad divina, que es la que realmente hace que todo exista y funcione.

​

Nosotros somos, solamente, una Identidad que cree existir.

​

Yo creo ser yo. Pero ese Yo tiene un inicio y un final.

 

Nazco, experimento y muero. Cada Yo nace, experimenta y muere.

​

Y habitamos un cuerpo, sin entender cómo funciona. Como un vehículo. Solo subimos en él, conducimos y aparcamos cuando llegamos a nuestro destino.

​

Pero cómo funciona el cuerpo. Por qué existe un universo en el que interactuar. Incluso por qué existo… Son cosas de mayores.

​

Todo eso lo posibilita y lo controla la Inteligencia Inconsciente.

​

Ella tiene una voluntad. Más bien ella es una voluntad.

​

Nosotros no. Ella.

​

Cuando nacimos Ella ya existía.

​

Cuando muramos también existirá. Y, si miramos en nuestro interior, muy, muy en el fondo, podremos sentirla y conocerla.

​

Podremos escucharla. Ella nos habla todo el tiempo. Solo hay que escucharla con atención.

​

Eso es lo que en realidad somos. Nada más. Somos Ella, pero creemos ser Yo. Un Yo que no existe.

​

Llamémosle Presencia si quieres.

​

Es todo mucho más sencillo de lo que parece. Solo debemos ir en la dirección que nos marca.

​

Ella se encargará de todo. Nosotros solo debemos hacer nuestra parte. El último paso lo dará Ella.

 

¿Y si tu teoría no es cierta?

 

No pasa nada. En ese caso, simplemente, habré creado un lugar físico donde intentaremos que los seres que lo forman vivan en paz.

​

Aunque no esté en lo cierto, ese lugar será la expresión máxima de la moral más elevada.

​

Y será un lugar que servirá de modelo sobre cómo debemos convivir con el resto de especies que habitan este planeta.

​

Entonces ¿qué necesitas de mí?

​

Según mi teoría, la manera de conseguir crear el Paraíso requiere de un montón de cosas que escapan a mi conocimiento y mi alcance.

 

¿Como qué? Pues como el conocimiento de la Inteligencia Artificial, de la nanotecnología. De la biología comportamental de cada especie de ser vivo.

​

Y carezco de los fondos económicos necesarios para crear un proyecto de tal magnitud.

​

Así que yo pongo una parte, la que me corresponde, y necesito que el resto de partes necesarias las pongan aquellas personas que puedan hacerlo y que deseen, tal como yo, crear el Paraíso.

​

Dices que de ahí nacerá un Ser Superior

​

Sí, creo que lo hará.

​

Ponía el ejemplo del puzle. Cuando agrupamos las piezas en secciones creamos un Ser Superior.

​

Y el Ser de Seres, el Supremo, es el puzle completo.

​

Mira, las células de tu cuerpo, que son miles de millones, dependen de ti. Si tú mueres, ellas también.

​

Y cuando digo Ser Superior no es una valoración. Es una cuestión de jerarquía.

​

No le asigna mayor o menor valor a cualquier manifestación de la vida. Todo ser es una manifestación de la única Fuente y, por tanto, posee el mismo valor.

​

Pero en la jerarquía tenemos en la cúspide al Ser Supremo y, por debajo, el resto de seres inferiores.

 

A ver, ¿eso a lo que llamas Entorno Perfecto se puede crear?

 

Sí, estoy convencido de que sí.

​

Requiere una inversión de dinero inmensa. Una fortuna.

​

He pensado si esto era una utopía o es algo real. Y, aunque suene futurista y parezca ciencia ficción, también he pensado que si ha habido un momento en la historia de la vida en el que se pudiera crear el Entorno Perfecto, ese momento es ahora.

​

Porque tenemos el conocimiento y la tecnología necesaria para poder crear un espacio en el que controlemos el comportamiento de todo ser vivo, sea una célula microscópica, una planta o un elefante.

​

Jamás la Vida ha tenido la posibilidad de emprender tal sueño.

 

Pero hablas de una teoría que podría ser cierta, o no. De hecho, lo más probable es que no lo sea, ¿cierto?

 

Sí, claro, lo más probable es que mi teoría no sea cierta.

 

Como ya he dicho, aunque no sea cierta, el hecho de crear un lugar físico donde los seres puedan convivir en paz es un gran avance, lo mires por donde lo mires.

 

Y, aún así, tengo una manera de comprobar si mi teoría es cierta, o no lo es.

​

Se puede comprobar en un laboratorio.

​

Creo que para validar esta teoría solo necesito probar con seres unicelulares en un cultivo microscópico.

​

Si siguiendo mi teoría se puede llegar a crear un ser pluricelular, entonces podré validarla.

​

Y habremos resuelto el gran misterio de la biología.

​

Si se puede hacer siguiendo una estrategia lógica, entonces podré demostrar un elevadísimo porcentaje de mi teoría y, en ese momento, la probabilidad de que mi teoría sea cierta habrá aumentado muchísimo.

​

Si se consigue ese hito habremos creado el Entorno Perfecto a nivel microscópico.

​

Y tendremos la llave para crear el Jardín del Edén.

 

¿Por qué vas a lograr tú, que no eres científico, algo así?

 

No soy científico. Yo no sé manejar un cultivo ni interactuar con seres microscópicos.

 

Pero conozco los principios que deberían provocar la emergencia de un ser pluricelular, a partir de seres unicelulares.

​

Como ya he dicho anteriormente, no digo que vaya a ser fácil, porque no lo creo. Pero estoy convencido de que es posible.

​

El principio básico que podría lograrlo es este:

​

Todo ser vivo está sujeto a la percepción.

​

Percibe el entorno como hostil.

​

Para que se inicie la fase de asociación, hay que modificar la percepción para que el Entorno se perciba como pacífico.

​

Entonces se producirá un cambio de comportamiento en esos seres unicelulares.

​

A partir de ese momento habrá que guiarlos hacia la fase de cooperación.

​

A esta le seguirá la de especialización y, pum, estaremos a las puertas de la emergencia de un ser pluricelular.

​

Creo que la agrupación de cualquier ser, al nivel que sea, sucede por la aparición de una Entidad.

​

Esto también está desarrollado en el libro.

​

De manera muy simple, imagina una Entidad como si fuera el borrador de una Identidad Superior.

​

Una Entidad está formada por Identidades.

​

Y la Entidad permite cambiar la percepción individual por percepción colectiva.

​

Porque las Identidades transfieren su percepción individual a la Entidad, y esta se la reemplaza por percepción colectiva.

​

La percepción colectiva y la individual forman la percepción disponible de cada Identidad.

​

Entre ambas suman el 100%.

​

¿Cómo diferenciarlas? 

​

Básicamente, cuando la percepción individual es muy elevada y la colectiva muy reducida, como un 90 % frente al 10 % de la percepción colectiva, se persigue el bien individual.

​

Como ejemplo, un tigre, una araña o una culebra.

​

Cuando la percepción colectiva tiene un porcentaje relevante, pero menor del 50 %, se persigue el bien común.

​

Como ejemplo, una manada de lobos o una bandada de patos.

​

Pero cuando la percepción colectiva supera el 50 %, se persigue el bien superior.

​

Como ejemplo, un panal de abejas o un hormiguero.

​

Y creo que la finalidad de toda Entidad es la emergencia de un Ser Superior.

​

Así, por resumir, creo que toda agrupación persigue la emergencia de un Ser Superior.

​

El proceso de agrupación sucede por la transferencia de identidad (o transferencia de percepción).

​

Las identidades dejan de ser ellas mismas conforme van transfiriendo su propia percepción a la Entidad.

​

La Entidad recibe esa percepción y va concretándose cada vez más.

​

Hasta que las identidades dejarán de ser ellas mismas para pasar a ser, todas ellas, la nueva Id-Entidad superior.

​

Piensa en un hormiguero. Las hormigas tienen mucha más percepción colectiva que individual. Los hormigueros son Entidades con un porcentaje de transferencia de percepción muy elevada.

 

Ahora responde, ¿crees que una hormiga es más ella misma, o el hormiguero?

 

No acabo de entender eso de la Entidad y la transferencia de Percepción.

 

Es normal. Este es el más importante de todos los conceptos que he desarrollado.

 

En el libro dedico muchísimas páginas a este proceso. Pero intentaré ilustrarlo ahora con un ejemplo muy simple.

​

Y, quizá, algo que tardó millones de años en suceder y que voy a explicar como si fuera un proceso de pocos meses.

​

Piensa en una hormiga si no viviese en un hormiguero.

​

Ella perseguiría su propio bienestar, el bien individual.

​

Buscaría el alimento para ella. Se haría su propio refugio. Y estaría alerta para evitar depredadores. 

​

Y si encontrase otra hormiga pelearía con ella por el territorio.

​

Imagina que, de pronto, percibe el entorno como pacífico al conocer otras hormigas y empiezan a asociarse.

​

En vez de pelear con ellas, todas deciden llevarse bien y convivir.

​

Pueden protegerse mejor de los enemigos. Pueden vigilar mejor el refugio mientras otras descansan.

​

Y empiezan a cooperar. Buscan alimento juntas para todos, por ejemplo.

​

Persiguen el bien común.

​

Es decir, defienden los intereses de todos los miembros del grupo.

​

De pronto empiezan a especializarse.

 

Una de ellas será la hormiga reina.

​

Otras las obreras. Las guerreras...

​

Y llega un momento, sin saber cuándo exactamente, en el que están dispuestas a morir por el hormiguero.

​

Ya no importan ellas. Ni como individuos ni como grupos.

​

Importa el hormiguero. 

​

Piensa en esto. Si persiguieran el bien común, protegerían la vida de cada hormiga.

​

Pero no, todas ellas dan su vida por defender el hormiguero.

​

Eso es porque ha nacido el bien Superior

​

Porque el hormiguero es el borrador de una Identidad Superior que estará formada por todas las hormigas.

​

Desde la primera agrupación las hormigas formaron la Entidad.

​

Y esta ha ido concretándose poco a poco. 

​

Las hormigas han dejado de tener percepción individual, que han ido transfiriendo y recibiendo a cambio percepción colectiva.

​

Cada vez han transferido mayor porcentaje de percepción.

​

Cada una de ellas ha dejado de ser ella misma para pasar a ser el conjunto.

​

Y si pudieran completar el proceso de transferencia, esa Entidad (el hormiguero), emergería como una Id-Entidad Superior.

​

Sería un ser vivo formado por todas las Identidades (las hormigas).

​

 

¿Eres consciente de que mucha gente se puede reír de ti por todo esto?

 

Sí, claro que lo soy.

 

Es algo que sé desde que empecé a pensar en todo esto.

 

Pero mira, llevo 13 años dedicando mi vida a rescatar y cuidar de animales.

​

Me he preguntado muchas veces qué es la vida, qué sentido tiene y si tiene alguna finalidad.

​

Mucha gente se lo ha preguntado también, no digo que no.

​

Pero yo he creado una teoría con una respuesta muy sólida.

​

Quien quiera se puede reír de esa teoría.

​

Pero, con toda probabilidad, lo hará sin haber leído el libro.

​

Porque estoy convencido de que, leyendo el libro, poca gente encontrará motivos para burlarse.

​

Si aún así lo hacen, perfecto, soy una persona con mucho sentido del humor.

​

Pero insisto, he dedicado tiempo a buscar una respuesta a preguntas fundamentales.

​

Ojalá alguien hubiera escrito este libro y yo lo hubiera leído hace años.

​

Así que, a quien quiera burlarse, le invito a que lea el texto y después se burle de ello.

 

Si puede.

 

¿Cómo conseguirás que el león pueda dormir junto al cordero sin devorarlo?

 

Eso es muy sencillo.

 

Controlar que un animal como un león no se coma a un cordero es sencillo.

 

Contamos con tecnología de sobra para ello.

​

Por ejemplo, un perro se comerá a un cordero si nadie se lo impide.

​

Pero a base de correcciones aprende a no hacerle daño.

​

El comportamiento instintivo se puede modificar.

​

Simplemente, en cuanto el león tenga algo que le impida comerse al cordero, dejará de hacerlo.

​

Al no poder atacarle, dejará de verlo como una presa.

​

Incluso llegará a verlo como un compañero con el que poder convivir y jugar.

​

El reto no es eso. Como ya he dicho, eso es bastante sencillo.

​

El reto es impedir que un pájaro se coma a un insecto.

​

Que una araña se coma a una mosca.

​

Y más difícil aún.

​

Que una bacteria o un virus no ataque a las células provocando una enfermedad.

​

El mundo de lo pequeño es mucho más complejo de controlar que el mundo de lo grande.

​

No obstante, la tecnología actual abre un abanico de posibilidades.

​

Hace 20 años esto era impensable.

​

Ahora contamos con Inteligencia Artificial, sistemas de reconocimiento gráfico y con nanotecnología.

​

Creo que ha llegado el momento en el que podemos conseguir casi todo aquello que nos propongamos.

​

Pero hay otro reto más grande aún.

​

Si nadie se come a nadie, ¿qué come cada ser?

​

Este es, quizá, el mayor reto al que nos enfrentamos.

 

Que nadie se coma a nadie y, sin embargo, todos y cada uno de los seres reciba su alimento.

 

Si nadie se come a nadie ¿significa eso que la alimentación se basará en fuentes inorgánicas?

 

Quizá sí.

 

Quizá debamos aprender del reino vegetal, que se alimenta sin depredar.

 

Quizá podamos crear alimento replicando el proceso de fotosíntesis en gigantescas plantas fotovoltaicas de procesamiento de alimentos.

​

Quizá, hasta que podamos lograrlo, debamos producir el alimento a base de frutos. De manera que no depredemos a ningún ser, si no los frutos que produce para replicarse.

 

Son solo ideas.

 

Pero si no tienes las respuestas y no sabes cómo resolver los problemas, ¿de qué estamos hablando?

 

Es que no necesito tener las respuestas a todas las preguntas.

 

Yo tengo mi área de conocimiento.

 

Yo he desarrollado esta idea, pero la especialización es necesaria para responder al resto de preguntas.

​

Necesito a esa gente capaz de dar esas respuestas que no tengo.

​

Asociación, Cooperación y, por supuesto, Especialización.

​

Este no es un proyecto vulgar que cualquiera puede llevar a cabo.

 

Es, probablemente, el proyecto más ambicioso y complejo de cuantos se ha planteado la humanidad.

 

Me sigue pareciendo el sueño de un entusiasta, pero no lo veo realista.

 

Sí, probablemente parece poco realista.

 

Yo no he dicho que fuera fácil.

 

Si tengo la oportunidad, lo llevaré a cabo sin dudarlo.

​

Al menos, lo intentaré.

​

Pero, quizá, no sea este el momento adecuado.

​

En ese caso, simplemente, seguiré hablando de la idea con la esperanza de que alguien lo lleve a cabo más adelante, cuando el momento adecuado se presente.

 

Y, ahora, piensa una cosa. La inspiración es la fuente de todas las ideas.

​

Nadie sabe por qué unas personas obtienen esa inspiración y otras no.

​

¿Y si la inspiración proviene de la Inteligencia Inconsciente?

​

Así, las ideas trascendentes, las que están adelantadas a su época y no provienen de ninguna fuente lógica en particular, serían algo que flota en la mente colectiva y que, en cierta medida, todas las personas escuchamos.

​

Pero no todas las personas deciden hacerle caso.

​

Al parecer yo sí que le he hecho caso. Y, ahora, esa idea ya no es algo abstracto en la mente colectiva.

​

Ahora es algo concreto.

​

Ahora cualquiera puede hacerle caso.

​

Así, la idea del Entorno Perfecto no es fruto de la casualidad o el ingenio de una persona.

​

Sería, según mi punto de vista, una idea colectiva manifestada en la mente.

​

Primero en la mía, pero ahora, al compartirla, en la de muchas más personas.

​

Puedes creer en ello, o no. Puedes pensar que estoy loco, o no. 

​

No tiene importancia. Estamos en un punto de inflexión.

​

Nunca antes la ciencia, la moral y la tecnología habían estado tan avanzadas. Y lo hacen de forma sincronizada.

​

Como si este momento se hubiera estado preparando desde hace mucho.

​

¿No te pica la curiosidad? Quizá, la percepción genera el universo y no al revés.

​

Quizá, la mente crea el sueño de la realidad y el escenario al que llamamos universo. La materia.

​

Y, quizá, haya llegado el momento de regresar al origen. El regreso al hogar.

​

No creo que nadie se sienta atraído por la idea y se lance a la aventura junto a ti.

​

Subestimas la ambición humana.

​

La Inteligencia Inconsciente nos ha guiado durante toda nuestra vida.

​

Lo hace de manera sutil pero, con toda probabilidad, el camino que has escogido te ha llevado al punto actual y a leer sobre esto en este momento.

​

El sueño de crear el Paraíso y, más aún, crear un Ser Superior, no es baladí.

​

Apela a los anhelos más profundos de nuestra mente y resuena con fuerza.

​

La vida es un sinsentido.

​

Dedicar una vida a sueños que morirán con uno.

​

¿Eso es todo?

​

Pienso que no.

​

Mira, crear un Ser Superior no es solo inevitable.

​

Sucederá antes o después, porque la voluntad de la Inteligencia Inconsciente no cesa en su empeño.

​

Pero formar parte de ello, ahora, es digno del más ambicioso de los sueños.

​

Un sueño que no morirá con uno, si no que perdurará en el tiempo, hasta que el Ser Supremo emerja y la aventura de la vida llegue a su fin.

​

Cuéntame algo que me convenza de que hay algo de cierto y coherente en esto que me cuentas.

​

Bien.

​

Te voy a hablar de la Identidad y la experiencia subjetiva.

​

Piensa en la totalidad. El todo.

​

Ese todo es individual. Si el todo no fuera individual, no sería el todo.

​

Imagina que el todo fueran dos partes, o tres. ¿Cuál de ellas sería el total?

​

El total es individual. Y sabe que es el todo.

​​

Sabe que es el todo porque no hay nada que no sea ella.

 

Y se parece más a un pensamiento que a un objeto. 

​​

Para facilitar la comprensión, imagina una mente que sabe que existe. 

​

Pero, si puedes imaginar aún más, imagina una mente absoluta, pero que está en reposo.

​

Absoluta implica que no hay pensamiento que no esté contenido en esa mente.

​

No hay idea que no esté contenida en ella.

​

No hay lugar, ni momento, ni nada que no esté contenido en ella.

​

De hecho, imagina que es la mente que lo conoce todo, porque todo lo que vaya a existir lo piensa ella.

​​

Es una Mente en reposo.

​

Esa Mente es la Presencia

​

Sabe que es.

 

Pero es solo Presencia, sin poder afirmar que es Alguien, aún.

​

Solo Presencia.

​

Mientras esa mente está en reposo, no tiene pensamientos y nada existe.

​​

Y, en algún momento, el reposo se rompe y empieza a pensar.

​​

Esto sucede porque el Total se fragmenta.

​​

Ahora ¿Qué sucede cuando fragmentas el total?

​

Que hay dos partes que creen ser el total.

​​

Si las dos partes creen ser el total ¿Cómo procesa cada una de ellas el hecho de que haya algo que no sea ella misma?

​​

Cada una de esas dos partes se siente a sí misma.

​

La característica propia de la Presencia es sentirse, por ello siente su Presencia.

​

Le llamo autopercibirse.

​​

Cada una de las dos partes se siente. Pero no sienten a la otra parte.

​​

Cuando el Total se ha fragmentado ha sucedido una separación, como si divides un círculo dibujando una raya en medio.

​​

Así que, cada parte, al no poder sentir a la otra (autopercibirla) la imagina, por llamarlo de alguna manera.

​​

En realidad, la perciben.

​​

Fíjate que diferencio entre autopercibir, que es sentir tu propia Presencia y validar que existes, y percibir.

​​

Percibir es imaginar (o pensar) a la otra parte, lo que no soy yo.

​​

Así que, cada una de esas partes percibe a la otra.

​

Para ello, cada una de ellas se autorreferencia.

​​

Es decir, yo soy yo. Pero hay algo que no soy yo.

​​

Si yo soy yo, y algo que no soy yo, eso debe estar ubicado más allá de mi Presencia, que es lo que puedo Autopercibir. 

​

E imaginan a la otra parte en un escenario, lo que está fuera de sí mismas.

​​

Ya que no siento a la otra parte, dibujo el escenario y a la otra parte que no soy yo, ubicada en él.

​​

Así, me identifico respecto a lo que no soy yo.

​​

Es decir, yo soy alguien separado del resto. Por lo que hay algo que no soy yo.

​

Eso que no soy yo está ubicado fuera de mí.

​​

Y me identifico para diferenciarme de eso que no soy yo.

​​

Acaba de nacer el Yo, la identidad. Única para cada ser.

​​

Un Yo en un escenario. Siendo el escenario todo aquello que no soy yo.

​​

Y así, de esta manera tan curiosa, han restaurado la totalidad.

​

Así, sumando el Yo más lo que no soy yo, se restaura la totalidad.

​​

Bien, este proceso que acabo de explicar, tan extraño, tiene unas repercusiones enormes.

​​

De hecho, tú te sientes a ti mismo, pero no sientes el resto. No eres capaz de sentir a nadie ni nada más.

​​

Solamente puedes validar tu propia presencia.

​​

El resto lo percibes.

​​

A ti no te percibes, sino que te autopercibes. Te sientes.

​

En la realidad o en el sueño. Siempre eres tú en un entorno, donde ubicas al resto de seres que crees que existen.

​​

Y digo que crees que existen porque, al no poder sentir su presencia, solo intuyes que existen.

​

Pero esos seres existen. Tú estás hablando conmigo, así que ambos existimos.

​

¿De verdad? Durante un sueño mantienes conversaciones con otros seres e interactúas con ellos. En un escenario.

​​

Pero no puedes validar que existen, al contrario de ti mismo, que sí que puedes validarte porque sientes tu Presencia.

​​

De hecho, durante el sueño crees que existen.

​

Y al despertar, vaya, resulta que no existían.

​​

Pero yo sí que he existido durante ese sueño y al despertar, porque siento mi presencia.

​​

Así, tu presencia, sumado a lo que percibes en el exterior, suman la totalidad.

​​

Yo, más lo que no soy yo, formamos la totalidad.

​​

En la realidad, en el sueño o cuando imagino.

​​

Eso es la experiencia subjetiva.

​

Esto está explicado en el libro con mucho más detalle.

​

Pero este proceso es lo que genera todo el universo.

​​

El universo era minúsculo en el origen. Solo dos identidades.

​​

Y cada Identidad empezó a repararse y replicarse.

​​

Los dos principios básicos que diferencian la materia viva de la inerte.

​​

¿Por qué lo hicieron?

​

Una pregunta ¿esto que me cuentas es importante para que puedas crear tu Entorno Perfecto?

 

Claro, estos principios que he desarrollado en mi teoría son los que me permiten afirmar que la percepción crea la realidad.

​

Y me permiten descifrar el objetivo de la Inteligencia Inconsciente.

​

Y me permiten saber que la vida se está intentando agrupar en el Ser Supremo.

​

Y, ante todo, me han permitido comprender el proceso de transferencia de Identidad con el que crear el Entorno Perfecto.

​

Así que, si te parece bien, continúo.

​

¿Por qué lo hicieron?

​

No sé, ¿por qué se repararon y replicaron?

​

Para restaurar la eternidad y la infinidad.

​

La percepción es individual, pero se ha de sincronizar con la otra identidad. Porque ambas identidades son la misma en realidad. La única que existe y que piensa que es dos a la vez.

​

La Presencia es individual porque es el Todo.

​

Cuando se manifiesta en una Parte autopercibida, es la misma Presencia. La única.

​

Es la Autopercepción.

​

Cuando emergen las dos Identidades originales, lo hacen sobre la única Mente que hay, la Presencia.

​

Así que esa Mente está teniendo dos percepciones simultáneas y las sincroniza inmediatamente en su única Mente.

​

Como imaginarás, eso genera muchos errores.

​

Simplifiquemos para entender este punto.

​

Pongamos que la primera Identidad percibe y el escenario que crea es una habitación.

​

Pongamos que la segunda Identidad percibe y el escenario que crea es una isla en medio del océano.

​

Las dos Identidades nunca se encontrarían ni podrían interactuar estando cada una en un escenario diferente.

​

Pero se sincronizan inmediatamente porque son dos percepciones simultáneas en la misma mente.

​

Si fuerzas la unión entre una isla y una habitación, sucederán un montón de errores de sincronización.

​

Así que, el escenario varía de manera dramática y las formas no se pueden mantener.

​

La entropía de ese escenario es altísima.

​

Al haberse autorreferenciado, han dibujado una separación entre Yo y eso que no soy yo.

​

Han dibujado un cuerpo.

​

Esos cuerpos, al igual que todo el escenario, varían a cada instante por la sincronización de ambas percepciones subjetivas.

​

La variación de los cuerpos es resultado de la entropía.

​

Porque los cuerpos también son resultado de la percepción; por tanto, son parte del escenario.

​

Como ambas Identidades perciben cambios en la estructura de los cuerpos, la Inteligencia Inconsciente cree que están sufriendo daños.

​

Y, por eso, la Inteligencia Inconsciente repara esos cuerpos intentando evitar que mueran.

​

Reparar un cuerpo significa devolverlo a la estructura previa que tenía antes del cambio percibido.

​

La Inteligencia Inconsciente conoce la estructura y la repara todo el tiempo.

​

Para que no muera. Porque la totalidad es Eterna.

​

Si la estructura sufre un cambio, morirá.

​

Es decir, la Inteligencia Inconsciente siente que si no repara el cuerpo al sufrir un daño, la Presencia (en realidad es la Autopercepción) que hay en ese cuerpo no podrá mantenerse y se diluirá en el escenario. Y eso impedirá que sea eterna.

​

¿Y por qué se replica?

​

La Totalidad es eterna e infinita. Lo ocupa todo y permanece siempre.

​

Así, con la reparación intenta ser eterna.

​

Es la variable Tiempo del universo.

​

Y la variable Espacio del universo tiene que ver con la infinidad.

​

La totalidad es infinita, no hay nada que no sea ella misma.

​

Así que la Identidad, al percibir el escenario, lo que no soy Yo, provoca que la Inteligencia Inconsciente quiera ocuparlo todo.

​

Es importante apuntar que la identidad es el Yo.

​

Pero la identidad no se repara ni se replica. 

​

Son comportamientos que suceden de manera no consciente.

​

Incluso en la reproducción de los mamíferos (replicación) la identidad solo ejecuta el acto sexual.

​

Pero la replicación, mediante la fecundación de un óvulo por el espermatozoide, así como el desarrollo del embrión y el parto, son cosa de la Inteligencia Inconsciente.

​

Decía que la Inteligencia Inconsciente va a intentar ocupar todo el espacio.

​

Para ello, ha de expandir la Presencia que hay en la Identidad, al resto del escenario que no soy Yo.

​

Y, para ello, va a repetir la estructura del Yo. Tantas veces como haga falta. Hasta que el Yo ocupe todo el escenario percibido.

​

Es matemática pura y dura.

​

Si yo ocupo el 1/1000 del total percibido, al replicar mi estructura 1000 veces, ocuparé el total. Ya no habrá nada que no sea yo.

​

Volveré a ser infinito.

​

Pero no es tan sencillo como parece. De hecho, la replicación se complica muchísimo.

​

Porque cada réplica empieza a percibir y se autorreferencia.

​

Cuando una Identidad se replica, en vez de ocupar 2 sobre 1000, la réplica percibe y, por tanto, es 1/1000.

​

Cuando se replique de nuevo, en vez de ser 3/1000, serán 3 Identidades, siendo cada una de ellas 1/1000.

​

Es decir, cada nueva identidad no es la misma que la replicante. Nunca se acerca al infinito.

​

Lo que hace es que, al aumentar el número de Identidades, el escenario percibido se amplía.

​

Y como cada nueva identidad percibe que es 1/1000, empieza a replicarse. Cada Identidad se replica de manera compulsiva, sin que eso solucione el problema que lo originó.

​

Al revés, cada vez el escenario percibido es mayor.

​

Habrá infinitas Identidades siendo cada una de ellas 1/1000. Nunca serán 2/1000.

​

Pero cuantas más Identidaes hay, más grande es el escenario percibido.

​

Y de esta manera, desde un origen minúsculo, que era el escenario percibido por 2 identidades, pasamos a un escenario que tiende al infinito, con un número de Identidades que, a su vez, tiende al infinito.

 

Y, como el escenario se sincroniza entre todas ellas, cada vez es más estable. Empieza con una entropía total en el origen, hasta una entropía casi inexistente por el número simultáneo de perceptores.

​

La sincronización de percepciones es inevitable. Pues todo sucede en el sustrato de la totalidad. Si no se sincronizan las percepciones, las Identidades no pueden interactuar entre ellas.

​

Si yo percibo de manera individual, como en un sueño, y tuviera que interactuar contigo, que tienes otro sueño, no habría manera de que nos encontrásemos en él.

​

Yo soñaría que estoy en una casa, y tú en medio del mar.

​

Pero al sincronizar las percepciones, generamos un escenario compartido. Cuantos más perceptores, más estable será.

​

Es decir, cuantas más fuentes de datos, mayor sentido común tendrán las reglas de sincronía.

​

Esto te resultará familiar, ¿no?

​

No, no lo hace. ¿Por qué debería resultarme familiar?

​

Pues porque te acabo de narrar el inicio de la vida.

​

El inicio del escenario al que llamamos Universo.

​

El nacimiento de la conciencia con las Identidades y cómo esta genera el universo.

​

El nacimiento de la sincronización de percepciones, unas reglas que dotan de sentido al escenario. Sin esas reglas de sincronía, el escenario no podría mantenerse.

​

Las reglas de sincronía se conocen como leyes físicas y se aplican en el contexto de la percepción simultánea, dotando de estabilidad al escenario.

​

Las heredamos al replicarnos. Porque provenimos del mismo origen, esas dos identidades.

​

Y, como esas dos identidades percibían ellas dos solas en el origen, con solo dos fuentes de datos que debían sincronizarse, generando muchos errores de sincronía, la entropía era brutal.

​

Siendo la entropía ahora casi inexistente en un escenario que tiende al infinito. Un universo que se expande sin cesar.

​

Es el Big Bang, pero explicado desde la posibilidad de que la conciencia genere el universo, y no al revés.

​

La vida, la Conciencia, más bien la Autopercepción, intenta retornar al origen.

​

Esa separación inicial que generó la idea de que la totalidad se había fragmentado, haciendo aparecer las dos primeras identidades, ha de revertirse.

​

La Inteligencia Inconsciente es la función de restauración de la totalidad.

​

Nos repara porque la totalidad es Eterna.

​

Nos replica porque la totalidad es infinita.

​

Y nos agrupa porque la totalidad es una sola.

​

Es decir, hay infinitas identidades que han de ser una sola de nuevo. Para ello se busca que todas formemos una nueva identidad superior.

​

Es el proceso de convertir muchas en una sola. Y solo se puede hacer mediante la agrupación.

​

Las identidades transferimos nuestra percepción y pasamos a formar un Ser formado por todos nosotros.

​

Las células que te forman son eso.

​

Y, por este motivo, todos los seres vivos tenemos en nuestro interior ese comportamiento inconsciente.

​

Pero no todos lo tenemos activados.

​

Aunque en todos es potencial. Es decir, en todos los seres vivos se puede activar.

​

Eso es lo que haremos en el Entorno Perfecto.

​

Eso es lo que sucederá, finalmente, en todos los seres vivos del universo.

​

Que llegará el momento en que nos agrupemos en el Ser Supremo y la aventura de la vida, la experiencia de la conciencia, llegue a su fin.

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